La leyenda de los Lirios del Valle

- texto traducido: Leyendas de los rumanos

Muchos pueblos de Europa Occidental poseen la tradición que en el mes de mayo se celebre "el domingo de los lirios del valle". En Francia, Bélgica y Suiza, esta fiesta se celebra el primer domingo del mes, cuando la naturaleza adorna su capa multicolor con las flores más hermosas, que cargan el aire con perfume, color y salud. En la antigüedad, los chicos y chicas recogían lirios del valle pensando que dichas flores traen suerte en el amor.

En rumano estas flores se llaman LACRAMIOARE, palabra que deriva de LACRIMA (lagrima). 

La leyenda cuenta que una vez, en medio de un castillo de cuento de hadas, hubo un rey que tenía dos hijos, un chico y una chica. Cuando nacieron, ambos niños recibieron por parte de su hada buena los mejores regalos: hermosura, sabiduría, conocimiento. Los dos hermanos crecieron pasando la mayoría del tiempo juntos, jugando en los jardines del castillo, jardines llenos de flores.

Por desgracia, cuando cumplieron 10 años, cayó una enfermedad muy cruel sobre esa tierra y todo el reino se llenó de tristeza y de dolor. Entre los afectados por esa enfermedad  estaba también la hija del rey, que se volvió cada vez más débil hasta que, finalmente, se murió. 

El hijo del rey, que la quería más que a su vida, empezó a llorar sin parar. Entonces sus lagrimas se convirtieron en unas flores blancas, pequeñas, que cubrieron todas esos valles y jardines donde solían jugar él y su hermana. El príncipe huyó del castillo y se escondió del mundo para no ser visto por los demás como lloraba por la muerte de su querida hermana. Las flores que nacieron de sus lágrimas recibieron el nombre de LACRAMIOARE ...